El Vaticano compartió este domingo que los estudios de sangre del Papa Francisco presentaron síntomas de una insuficiencia renal “leve“. Sin embargo, su estado sigue siendo considerado como “crítico“.

El comunicado de la Santa Sede detalló que el sumo pontífice sufre “una insuficiencia renal inicial, leve, que actualmente está controlada“, y se señaló que Bergoglio se encuentra “vigilante y bien orientado”.

De esta forma se informó que a los problemas respiratorios del líder de la iglesia católica, se le suma esta complicación renal.

Además, se afirmó que “la complejidad del cuadro clínico y la necesaria espera para que las terapias farmacológicas proporcionen algún feedback requieren que el pronóstico siga siendo reservado”.

Por el momento, el Papa sigue recibiendo oxígeno, aunque no se registraron nuevas crisis respiratorias.

• Fuente: El Sol